HISTORIAS QUE VALEN LA PENA CONOCER

¿QUIEN ES PABLO TOVIGGINO?

FUENTE: ROSARIO 3

El escándalo por los arbitrajes en el fútbol argentino, que el martes sumó un nuevo capítulo con fuertes cruces entre el técnico de Independiente Carlos Tevez y la dirigencia de la AFA, puso nuevamente en el ojo de la tormenta a Pablo Toviggino, un rosarino de 44 años que es amigo de Gonzalo Belloso, el presidente de Central, y que fue acumulando poder en la casa madre a partir de su ascendencia en el fútbol del interior desde Santiago del Estero. ¿Quién es y qué hace el hombre al que el Apache fustigó en redes sociales?

Toviggino nació en Rosario en 1979, aunque al poco tiempo se mudó a Santiago del Estero. En la actualidad, según la nómina de autoridades publicada de manera oficial, es el tesorero de la AFA, integrante del Consejo Directivo de la entidad y presidente de la Liga Santiagueña. En los pasillos de calle Viamonte se lo señala como la “mano derecha” de Claudio Tapia, el mandamás de la casa madre, quien lo llama “comandante”. 

Tal como recordó el periodista Federico Yáñez en un artículo publicado en 2020 en LetraP, el nombre de Toviggino cobró notoriedad cuando, antes de las elecciones en la AFA de 2015 que terminaron con el tristemente célebre resultado 38 a 38, fue denunciado por el presunto ofrecimiento de dinero a asambleístas a cambio de votos para el entonces candidato Luis Segura, dirigente de Argentinos, en una causa que no prosperó.

En ese momento, según precisa el mismo texto, Toviggino era vicepresidente del Consejo Federal, que nuclea a 220 ligas y más de 3.500 clubes. Segura desplazó de ese lugar a Roberto Fernández, un dirigente marplatense que apoyaba a Marcelo Tinelli, puso en su lugar al sanjuanino Alfredo Derito y, por presión de Ascenso Unido, ubicó a Toviggino como segundo.

Antes, este rosarino que no había sido jugador ni dirigente de ningún club de alto perfil y surgido del ambiente equestre, había comenzado a construir poder en Santiago del Estero como directivo del humilde Comercio Central Unidos, donde llegó a ser vicepresidente. Dicha provincia, en la que luego fue el máximo dirigente de la Liga, bajo el ala del Toviggino vio a tres de sus clubes llegar a los primeros planos nacionales: Central Córdoba ascendió a Primera y tanto el Atlético Mitre como Güemes alcanzaron la Primera Nacional. 

Un artículo de Infobae publicado en 2021 lo define como "aliado" del gobernador Gerardo Zamora y también cercano a Sergio Massa, excandidato a presidente y exministro de Economía: "Sus ascensos y su crecimiento exponencial no estuvieron exentos de polémicas. El presidente de Central Córdoba es José Felix Alfano, titular del Consejo Provincial de Vialidad. El presidente de Mitre es Guillermo Raed, vicepresidente tercero de la AFA y dueño de la empresa de bebidas Secco, auspiciante de infinidad de clubes del fútbol argentino. Ambos camisetas tienen como sponsor principal el logo de la provincia que, además de ser sede del Moto GP internacional, el TC y el Super TC 2000, construyó un monstruoso estadio denominado Madre de Ciudades que iba a hospedar partidos de la Copa América que finalmente se jugó en Brasil".

"En los pasillos de la AFA coinciden en que (Toviggino) es quien está detrás las designaciones arbitrales para los torneos federales o la Primera Nacional", señalaba también Infobae. 

En 2016, señala otro artículo de LetraP, cuando la FIFA intervino el fútbol argentino, fue uno de los cuatro miembros del Comité de Regularización junto al presidente Armando Pérez, el vice Javier Medin (exabogado de Socma), ambos impulsados por Mauricio Macri, y a la secretaria Carolina Cristinziano, propuesta por la Conmebol y actual vicepresidenta de Central. En enero de 2017, Toviggino denunció ante la FIFA que el Comité de Regularización no estaba cumpliendo con sus objetivos. Dos meses después, Tapia ganó las elecciones y lo designó secretario ejecutivo de la Presidencia y a cargo del Consejo Federal.

Actualmente, según le comentó el expresidente de una liga bonaerense a La Nación, Toviggino podría ser definido como un súper ministro: "Atiende el Consejo Federal, la Liga, el Ascenso, los árbitros, el Tribunal de Disciplina… Opera en todos los estamentos. Escucha a todos y les dice los que ellos quieren escuchar, aunque después decide según su pensamiento y mueve las piezas por conveniencia".

Las redes sociales le resultan una plataforma idea para polemizar y atacar a los detractores del Chiqui. En la lista aparecen el vicepresidente de Estudiantes, Juan Sebastián Verón; el presidente de River, Jorge Brito; el director técnico de Belgrano, Guillermo Farré; el plantel de Godoy Cruz; Juan Pablo Fassi, hijo de Andres, presidente de Talleres; y ahora Carlos Tevez. 

“Bullshit, mejor te lo digo en inglés. Jamás te vi sentado en una mesa del Comité [Ejecutivo] llevando un proyecto. Cuando la selección estaba abandonada y había que ayudar, te borraste. Te gusta criticar de atrás y si no mandás a algún “simulador” de los tantos que tenés. ¡A Laburar! En fin”, le respondió a Verón cuando la Bruja cuestionó la organización del fútbol argentino. 

La noche de la consagración de Central en Santiago del Estero, en diciembre pasado, Gonzalo Belloso mencionó a Toviggino en una entrevista con la transmisión de televisión. “Estábamos prácticamente fundidos, todos los asesores decían que vayamos a una convocatoria, y fue Chiqui Tapia con su poder político y un amigo mío como Pablo Toviggino, quien nos hizo la estructura de un desendeudamiento”, expuso el Pejerrey.

“Si no hubiera sido por ellos y por el ministro Massa, que nos ayudó a pagar seis inhibiciones que teníamos en FIFA, no hubiera sido posible. Ellos nos dieron una mano muy grande para poder arrancar”, agregó. 

Como reflejó LetraP en una nota de diciembre de 2023, el agradecimiento de Belloso a Toviggino, el rosarino de nacimiento y santiagueño por adopción fue porque al llegar a la presidencia del club de Arroyito se encontró con una deuda de unos 25 millones de dólares que hubiera sido posible de reestructurar y afrontar sin el acompañamiento de la AFA. 

El escollo más duro eran las inhibiciones que pesaban en la FIFA y le impedían a Central sumar nuevos jugadores al plantel de Miguel Russo. Por entonces, las gestiones con el ministro de Economía Massa dieron sus frutos y el Canalla pudo conseguir los dólares que necesitaba para levantarlas.