AYUDADO POR EL VIENTO

CUANDO TRIPODI HIZO UN GOL DE ARCO A ARCO EN COMODORO RIVADAVIA 

FUENTE: EL LITORAL .COM/ POR DARIO PIGNATA

“Con un gol de arco a arco de Emanuel Trípodi, la CAI le ganó a Atlético de Rafaela 1 a 0. Sobre la hora, el arquero desató la fiesta en Comodoro Rivadavia. La tarde no parecía una más ya desde el inicio. Es que el viento iba agregándole dramatismo al partido. Y Atlético parecía entender mejor cómo debía jugar frente a los factores climáticos. Así, buscando con remates desde cualquier parte, la visita era algo más. Aunque la CAI reaccionó y generó varias chances, pero chocó siempre con la seguridad de Gastón Pezzutti.Ya en el complemento, las ráfagas de viento soplaban a más de 100 kilómetros por hora. El local no podía manejar bien la pelota y Rafaela comenzó a enamorarse del empate que, parecía, iba a llevarse de un reducto difícil. Pero, parecía, porque cuando no quedaba nada, el arquero Emanuel Trípodi sacó un conejo de la galera. Aprovechó el viento y, desde 80 metros, clavó un tremendo misil que se le coló a Pezzutti y desató el delirio de todo Comodoro”. La crónica de ese 6 de abril de 2008 intentaba explicar la rareza.

Hoy, con más de 400 partidos profesionales, Emanuel Trípodi tiene anotadop un gol y fue de arco a arco en el sur del país.

Comodoro Rivadavia es un lugar conocido por sus bellos paisajes, pero en el mundo del fútbol también es conocido por sus fuertes ráfagas de viento. La Comisión de Actividades Infantiles, más conocido como la CAI, es el club más importante de esa provincia.

“Un 6 de abril del 2008, cuando el equipo jugaba en la B Nacional, recibió en su cancha a Atlético Rafaela. El encuentro finalizó 1-0 con un golazo de arco a arco de Emanuel Trípodi. Las ráfagas de viento de 100 kilómetros por hora le jugaron una mala pasada a Gastón Pezzutti, arquero de la Crema, quien sufrió el terrible misil que sacó Trípodi desde su arco”, recuerdan los medios sureños. “El gol de la CAI que recorrió el país y el mundo”, titulaban los diarios de Comodoro Rivadavia. Sin dudas, otro dato por el cual Ema Trípodi quedó en la historia.