martes, 12 de marzo de 2019

UN LOCO LINDO DEL FÚTBOL

GEORGE BEST LA LEYENDA 

 
En el futbol actual los futbolistas son verdaderas estrellas, su fama va más allá de lo que hacen dentro del campo. Son idolatrados y todo lo que sucede en su vida personal es documentado por los medios de comunicación.



La gente busca emular lo que hacen sus ídolos, tener sus peinados, adoptar sus posturas en un partido, comprar sus camisetas y mencionar sus frases hasta el cansancio. El futbolista actual es el nuevo “Rockstar”. Las grandes figuras de la actualidad tienen un antecesor en el sector mediático y fama fuera del campo, su calidad era indiscutida, su futbol envidiado, y su vida personal estaba en boca de todos.


En la década de los 60 y 70 la situación no era como en la actualidad. El futbolista era visto igualmente como un héroe pero los salarios no eran los que perciben los jugadores en la actualidad y su fama no era tan globalizada. Esta regla imperaba para todos excepto para George Best.


Su apellido no podía ser otro. Para muchos fue el mejor futbolista de su generación, incluso Pelé lo llamó “el mejor jugador del mundo”. El Manchester United tenía en Sir Bobby Charlton a su mayor héroe, el veterano por excelencia mientras George Best era el hombre carismático, el que movía a las masas pero lo más importante, su popularidad no estaba peleada con su calidad.



Nacido en Belfast, Irlana del Norte, llegó a las inferiores del Manchester United en 1961 con apenas 17 años. Un par de temporadas más tarde debutó con el primer equipo y así comenzó la leyenda. 


Best se desempeñaba como extremo o mediocampista. Tenía un control de balón único y un exquisito golpeo de balón con ambas piernas, pero lo que más impresionaba al mundo del futbol en esa época era su clase y técnica, ambas depuradas, parecía imposible que los defensas rivales pudieran quitarle el balón a Best. No había un futbolista en Europa con su capacidad técnica.


Poco tardó en convertirse en una de las máximas figuras del futbol inglés y su magia le ganó el sobrenombre de “El quinto Beatle”. Best era famoso en todos lados, dentro del campo era un futbolista único y fuera del mismo era reconocido por su estilo, su gusto por las fiestas y su popularidad con las mujeres, especialmente modelos.


El Manchester United no era el club más grande de Inglaterra como lo es ahora y vivía a la sombra del poderoso Liverpool. George Best formó parte de la generación que logró ganar la Copa de Campeones de Europa en 1968, la primera en la historia del club devil que tardó más de tres décadas en volver a coronarse como el mejor club del viejo continente.


En once temporadas Best anotó 179 goles y es el quinto máximo anotador en la historia del equipo. También ganó cinco títulos. 


George Best dejó el Manchester United en 1974 y durante una década militó en más de una decena de equipos, incluyendo “los Angeles Axtecs” de la NASL y puso fin a su carrera en 1984. 


Con su selección disputó 37 partidos entre 1964 y 1967. Tras su retiro siguió en el centro de los tabloides por su alocado estilo de vida.


George Best falleció a los 59 años por complicaciones tras un implante de hígado al que se sometió tres años antes. Ese día falleció el hombre pero la leyenda se mantuvo intacta.


En 1969 me di por vencido en las mujeres y el alcohol… Fueron los peores 20 minutos de mi vida”, una de las frases más recordadas de Best y que definen a la perfección su vida fuera del terreno de juego.


El futbol no ha sido testigo de otra historia como la de George Best, un jugador “bendecido” con una capacidad futbolística única que le llevó a ser considerado por el mismo Pelé como el mejor futbolista del mundo.El primer futbolista en convertirse en una verdadera estrella dentro y fuera del campo, pero también la persona atormentada por una vida de excesos y adicciones que finalmente terminaron con su vida a los 59 años.


Foto crédito: Manchester United.

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