viernes, 30 de septiembre de 2022

LA SELECCION ARGENTINA DE FUTBOL COMENZABA UNA ETAPA DE GLORIA

 A 48 AÑOS DE CESAR LUIS MENOTTI ASUMIENDO EL CARGO DE ENTRENADOR TECNICO

FUENTE: TELAM  

A salvo de lo inconducente de una lucha por dominar el territorio de la verdad y más allá de las antinomias en las que se cuecen las habas de los saberes; y de un análisis de segundo orden, como es el de la estética del juego, César Luis Menotti inspiró un antes y un después en la historia de la Selección Argentina.




El lunes 30 de septiembre de 1974, a tres semanas de cumplir 36 años, el rosarino Menotti se hizo cargo de la Selección después de un fecundo ciclo de tres temporadas en Huracán que había incluido la conquista del Metropolitano del 73 con el equipo de la legendaria delantera integrada por René Houseman, Miguel Ángel Brindisi, Roque Avallay, Carlos Babington y Omar Larrosa.

¿De dónde venía la Selección cuando llegó Menotti?


Años, lustros, décadas de manifiesta desorganización y carencia de estructura, coherencia y seriedad, cada tanto maquilladas con providenciales enviones de camadas de futbolistas notables: por caso, los que ganaron el Campeonato Sudamericano de Lima en 1967, “Los Carasucias”.

Considerado uno de los mejores defensores centrales de la historia del fútbol argentino, integrante del plantel de Inglaterra 66 y Alemania 74, Roberto Perfumo supo observar que “en aquellos tiempos, que te llamaran de la Selección no siempre era un orgullo, a veces era una incomodidad y un desprestigio. Cambiaban de técnico cada dos por tres, nunca sabías dónde entrenarías, no se respetaban los horarios”.

Argentina no había jugado los Mundiales del 50 y 54, después sobrevinieron el llamado “Desastre de Suecia 58”, una opaca participación en Chile 62, un buen Mundial en Inglaterra 66, la oprobiosa eliminación de México 70 y el carnaval organizativo de Alemania 74 que dilapidó el potencial de un plantel poblado de grandes futbolistas.

El primer partido del ciclo de Menotti se jugó en el estadio Monumental el 12 de octubre del 74, con un empate de 1-1 ante España y una alineación fundacional con Rubén Sánchez, Vicente Pernía, Jorge Paolino, Roberto Rogel (autor del gol), Jorge Carrascosa, Miguel Brindisi, Marcelo Trobbiani, Carlos Babington (Osvaldo Potente), René Houseman, Edgardo Di Meola y Enzo Ferrero.

Hacia finales de ese año y comienzos del 75 se puso en marcha un cronograma abarcador y ejecutado con inédita eficacia, que entre otros ingredientes destacó por la exploración y captación de juveniles y futbolistas del interior del país.

En ese contexto, novedoso, se desarrolló una paciente preparación con miras al Mundial 78 que incluyó la gira del 76: triunfos ante la Unión Soviética en Kiev y Polonia en Chorzow, derrotas con Hungría en Budapest y Hertha en Berlín y empate de 0-0 con Sevilla.

La búsqueda de la puesta a punto se afianzó en el 77 con varios cotejos internacionales que tuvieron lugar en La Bombonera y un año después la Argentina ganaría un Mundial de complejidad archiconocida a guisa de la entronización de la dictadura militar, de sus crímenes y de la sospecha nunca disipada del amaño del 6-0 con Perú en Rosario.

La verdad, o por lo menos una parte de las verdades sustanciales que desconocer sería torpe, injusto y por qué no disparatado, es que la formación que puso Menotti en el Mundial 78 fue una de las mejores de la historia del representativo albiceleste, sólida en un funcionamiento apuntalado por figuras excepcionales (Ubaldo “Pato” Fillol, Daniel Passarella, Osvaldo Ardiles, Mario Kempes, entre varios) y de alto rendimiento para vencer en la final a Holanda por 3-1.

Con la calificada base del 78 y un toque de renovación luminosa, la Selección Argentina llegó a España 82 en condición de favorita, pero ni por asomo tuvo un rendimiento capaz de garantizar terminar entre los cuatro primeros: apenas si jugó muy bien en la goleada de 4-1 a Hungría (primera jornada brillante de Maradona en los Mundiales), sumó un insípido 2-0 con El Salvador y cayó en el debut con Bélgica en el Camp Nou, y con Italia y Brasil en el ya desaparecido estadio de Sarriá, los tres en Barcelona.

De inmediato Menotti dio por cerrada su etapa en la Selección al cabo de ocho años y un total de 78 partidos, con 42 ganados, 18 empatados y 18 perdidos.

jueves, 29 de septiembre de 2022

UN TODO TERRENO

EDUARDO GERMAN "CHACHO" COUDET

FUENTE: "XENEN.COM.AR"/CARLOS AIRA

1.- Eduardo Germán Coudet nació en Capital Federal el 12 de septiembre de 1974. Formado en las divisiones inferiores del Club Atlético Platense. Volante diestro, con capacidad para moverse tanto en contención como ataque.




2.- Debutó en Primera División el 23 de octubre de 1993. Séptima fecha del Apertura. En cancha de Independiente, su equipo recibió a Boca Juniors. Dirigido por Ricardo Rezza, Platense formó con: José Miguel; Céliz (Coria), Mayo, Loyola y Broggi; Eduardo Coudet, Amodeo (Carlos Moreno) y Marcelo Espina; Diego Bustos, Mahía y Claudio Spontón. El partido finalizó igualado 0 a 0. En Platense jugó hasta junio de 1995. Fueron 56 partidos, con 2 goles señalados.

3.- A mediados de 1995 firmó para Rosario Central. Un equipo que conjugaba la veteranía de Omar Palma junto la juventud de Nuno Molina, Vitamina Sánchez entre otros. Debutó el 25 de agosto, cuarta fecha del Apertura, ante Independiente en Arroyito. Ingresó 24 minutos del segundo tiempo en reemplazo de Diego Ordoñez. Su primera etapa en Central coronó con la obtención de la Copa Conmebol 1995. Hasta junio de 1998, Coudet jugó 91 partidos, con 11 goles.

4.- En julio de 1998 pasó a San Lorenzo de Almagro. En Boedo tuvo una gran campaña, jugando 30 partidos, señalando 5 goles. Luego de aquella temporada 1998/99 pasó a River Plate.

5.- En Núñez mostró, tal vez, lo mejor de su carrera. Tres temporadas intensas. Campeón Apertura 1999 y Clausuras 2000 y 2002.. En esa primera etapa con la banda roja jugó 88 partidos, con 19 goles.

6.- En septiembre de 2002 pasó a Celta de Vigo. En Galicia estuvo tan sólo un par de meses, donde jugó 9 partidos, sin marcar goles.  Regresó a River Plate a comienzos de 2003,  consagrándose campeón de los Clausura 2003 y 2004. Allí puso final a su paso por River. En su último paso disputó 40 partidos, con 2 goles. 

7.- En junio de 2004 regresó a Rosario Central, club donde ya era un enorme ídolo. Su lugar en el mundo. Regresó el viernes 13 de agosto de 2004, con el uruguayo Víctor Púa como entrenador. Su equipo perdió 3 a 1 ante Arsenal en el Viaducto. Central formó: Robinson Zapata; Paulo Ferrari, Leonardo Talamonti, Alejandro Meloño, Emiliano Papa; Eduardo Coudet, Leonardo Borzani, Matías Irace; Pablo Sánchez; Emanuel Villa y Pablo Vitti. En aquel Apertura 2004 jugó 16 partidos, señalando un gol.

8.- En enero de 2005 pasó, nuevamente, a San Lorenzo de Almagro. Jugó todo el año en Boedo. Disputó 23 partidos, marcando 2 goles. En enero de 2006 regresó a Rosario Central. Su tercer paso. Nuevamente, jugó todo el año calendario en un club. Fueron 25 partidos, convirtiendo un gol.

9.- A comienzos de 2007 pasó al fútbol mexicano. Dos años en San Luis Potosí. El primer semestre de 2009 lo jugó para el Necaxa. Allí disputó 16 partidos, con un gol. En julio de aquel año regresó a San Luis, donde disputó el último semestre de 2009. En San Luis jugó 88 partidos, con 9 goles.

10.- En enero de 2010 regresó al fútbol argentino. Lo hizo vistiendo la camiseta rojinegra de Colón de Santa Fe. Fueron sólo cinco partidos, señalando un sólo gol.

11.- El tramo final de su carrera lo hizo en Estados Unidos. Primero en Philadelphia Union (9 partidos, sin goles) y Fort Lauderdale Strikers (20 partidos, seis goles).

12.- En diciembre de 2011 puso fin a su carrera. El Chacho, alegre y vital, realizó una carrera 18 temporadas como futbolista profesional. Disputó 516 partidos oficiales de Primera División, señalando 59 goles. Por su parte, jugó 93 partidos de Copa, marcando 13 goles. En total, 611 partidos, con 72 goles.

miércoles, 28 de septiembre de 2022

EN EL DIA DE LA VISPERA SE FUE UN GRANDE

NOS DEJO CARLOS PAIRETTI 

FUENTE: "CAMPEONES"

EN EL DIA DE AYER 27 DE SEPTIEMBRE DEL 2022, NOS DEJO CARLOS PAIRETTI.




El ex piloto de Turismo Carretera, de 86 años, se impuso en 22 competencias a lo largo de su trayectoria dentro de la máxima categoría nacional. Nacido el 17 de octubre de 1935 en la localidad santafesina de Clucellas pero afincado en Arrecifes, por donde se lo ha identificado, se forjó de la mano de grandes campeones como José Froilán González, Luis Rubén Di Palma o Carlos Marincovich.

Este año recibió un gran y merecido homenaje a los 60 años de su debut en el TC. Y en su pueblo natal le otorgaron el honor de nombrar la avenida principal, al igual que el tramo de la Ruta Provincial 13 entre Las Rosas y Rafaela. Precisamente, esta última ciudad le inauguró el mural de ‘Il Matto‘ (El Loco, como le apodaron pilotos extranjeros) en el óvalo del Club Atlético Rafaela.

Allí, Pairetti participó en las «300 Indy» del año 1971 con un enorme 12° puesto entre los mejores pilotos de la categoría estadounidense. Fue declarado Ciudadano Ilustre por el Consejo Deliberante de Arrecifes, junto a Marincovich (fallecido luego), García Veiga y post mortem a Luis Di Palma.

Cuando debutó en Vuelta de Pergamino condujo la coupé Chevrolet que perteneciera a Néstor Marincovich, tío de Carlos. El primer triunfo llegó en La Vuelta de Mar del Plata de 1963, extendiendo la racha con aquél vehículo hasta el año 1966.  Se recuerda, además, que en 1965 alternó manejo con un mítico Volvo 122 SB, obteniendo el triunfo en Villa Carlos Paz para ser reconocido como el único (hasta ahora) en ganar dentro del TC con una marca que no fuera Chevrolet, Dodge, Ford o Torino y sus derivados.

Amoldado con el ingreso de los prototipos al TC, apareció el Barracuda Chevrolet. Pero en 1968 llegaría la gran corona de Campeón Argentino de Turismo Carretera de la mano del popularmente conocido como Trueno Naranja. Ícono de la categoría y uno de los autos más bellos de la historia, selló el ciclo glorioso al coronar el título máximo por delante de los poderosos Torino y Liebres de la época.

También corrió en la Fórmula 1 Mecánica Argentina (ganó las 500 millas de Rafaela), la Fórmula B del TC para prototipos y pasó a manejar también Ford, tras años identificado con Chevrolet y las Dodge tanto GTX como 1.500. Internacionalmente también manejó vehículos de Fórmula 3 Europea (donde recibió el apodo anteriormente destacado). Se retiró en agosto de 1978.

Trascendió todo tipo de fronteras, como imponer el popular deporte en ambientes extra deportivos. Su personalidad extrovertida le permitió vincularse con las destacadas figuras de las épocas, siendo incluso partícipe en el cine argentino como doble de ‘Sandro’ y luego siendo él mismo protagonista de un film. También fue parte del impulso hacia el seguimiento en vivo las competencias por televisión con el desarrollo de la categoría llamada Club Argentino de Pilotos y que se extendió al resto de las categorías desde 1982.

Fue ícono de un cambio de época en donde la presencia del llamado ‘marketing‘ ganó terreno y con su aporte fue faro, también fuera de las pistas, para quienes lo siguieron.


martes, 27 de septiembre de 2022

TALENTO EN ESTADO PURO

UN JUGADOR FUERA DE SERIE: "EL CHINO RECOBA"

FUENTE: "KODRO MAGAZINE"

Álvaro «El Chino» Recoba siempre será recordado por su pegada, eterna en el Giuseppe Meazza, 72 goles imposibles de olvidar para los tifosi nerazzurri que lo veneraron con una devoción particular, pasión no siempre compartida por sus entrenadores y Massimo Moratti. La zurda de este internacional absoluto uruguayo fue mágica allí por donde pasó: Danubio, Nacional, Venezia, Torino, Panionios y la absoluta de Uruguay, siendo nombrado mejor jugador de Uruguay por el periódico EL País de Montevideo en 2012.




En su palmarés dos Scudetto, dos Coppa Italia y dos Supercoppa Italia, una UEFA y dos ligas uruguayas, además de haber marcado hasta 6 goles olímpicos (jugada en la cual el balón enviado con efecto desde el saque de esquina entra directamente en la portería rival) a lo largo de su carrera. Con Uruguay sumó un total de 69 internacionalidades y 11 goles.

Como gran parte del continente sudamericano, Uruguay sufría una dictadura militar en la segunda mitad del siglo XX, y en ese complejo contexto nació Álvaro Alexander Recoba un 17 de marzo de 1976. Apodado «El Chino» por sus rasgos orientales, se incorporó al Danubio FC de Montevideo como jugador juvenil debutando con tan solo 17 años en el primer equipo. Rápidamente, Recoba se ganó la reputación de ser un jugador con una hermosa zurda, hábil para regatear y superar al rival con velocidad y astucia, deleitando a las gradas.

En sus dos años en el primer equipo de Danubio, Recoba marcó 11 goles en 34 partidos antes de dar el salto a Nacional, el club más laureado de Uruguay. «El Chino» maduró y siguió goleando, 17 goles en 33 partidos entre 1996 y 1997. A los 21 años, y con cuatro campañas en la máxima categoría del fútbol uruguayo, Recoba parecía estar listo para dar el salto al Viejo Continente, siempre ávido de talento americano.

Quedan diez minutos y el Internazionale pierde 1-0 en casa contra el Brescia de Andrea Pirlo en la primera jornada de la temporada 1997/98. Con los millones del propietario Massimo Moratti quemando sus bolsillos, los nerazzurri acababan de batir el récord mundial de traer a Ronaldo al Giuseppe Meazza desde el FC Barcelona. Antes del partido, todas las cámaras y la atención se volcaron en «O Fenômeno», y se esperaba mucho de un equipo condenado a pelear sin final feliz durante años.

Con un resultado sorprendente, entró en escena otro nuevo fichaje sudamericano, aunque de perfil más bajo que el brasileño: El delantero uruguayo Álvaro Recoba. Ocho minutos después de sustituir a Maurizio Ganz, y a falta de diez minutos para el final del partido, Recoba recibió un pase de Benoît Cauet, y envió el balón a la esquina superior de la red desde 30 metros.

Cinco minutos más tarde, con los nerazzurri ya en ventaja, se concedió un tiro libre a 35 metros de la portería, y fue Recoba quien se encargó de la tarea. Álvaro, demostrando que tiene más de una cuerda en su arco, utilizó la precisión en lugar de la potencia en un momento de máxima ansiedad, y pasó el balón por encima de la barrera y lo colocó en la esquina opuesta de la red. El alivio fue palpable, e incluso Gianluca Pagliuca salió corriendo de su portería para unirse a las celebraciones.

Con Moratti, Ronaldo y el impulso de una espectacular remontada a sus espaldas, se esperaba que el Inter saliera por fin de la sombra del AC Milan y ganara el Scudetto por primera vez desde 1989. El debut de Recoba hacía presagiar que una posible nueva etapa dorada en la historia del club coincidiría también con el ascenso de una nueva estrella.

Tras su debut con dos goles, el futuro que tenía por delante parecía brillante. Recoba volvió a salir del banquillo en el segundo partido del Inter de la temporada 1997/98, aunque los nerazzurri cayeron por 4-2 ante el Bolonia. No volvió a aparecer hasta después de Año Nuevo, saliendo del banquillo para marcar en el empate a domicilio con el Empoli. Ese fue su último gol de la campaña y solo fue titular en un partido de liga en el resto de la temporada.

La delantera estaba repleta de jugadores de la talla de Ronaldo, Youri Djorkaeff, Iván Zamorano y otros jugadores curtidos en la alta competición europea, y Recoba era todavía un joven que intentaba adaptarse a una nueva cultura y nivel de fútbol. El Inter terminó segundo en la liga, y se convirtió en su mayor desafío al título en años, además de ganar la Copa de la UEFA. Tal vez, tras un periodo de adaptación, Recoba estaría listo para mostrar su indudable promesa en su segundo año.

Sin embargo, su duro comienzo en el norte industrial de Italia continuó en su segunda temporada, en la que solamente hizo una aparición como suplente antes de Navidad. El entrenador Luigi Simoni fue destituido en noviembre tras un comienzo indiferente, con solamente 17 puntos de 33 posibles, y sustituido por Marcello Lippi. Lippi, que había ganado el título de liga y la Liga de Campeones cuando dirigía al Juventus, esperaba hacer lo mismo con la plantilla de gran talento que había heredado de su predecesor.

Recoba no entraba en los planes de Lippi, y fue cedido al Venezia para el resto de la campaña 1998/99, donde fue titular en todos los partidos que le quedaban al equipo «arancioneroverdi», marcando diez goles y consiguiendo un respetable undécimo puesto. Irónicamente, el Venezia terminó a solamente cuatro puntos de su club matriz, que no se clasificó para la competición europea en lo que fue una campaña miserable.

Recoba regresó a San Siro para la temporada 1999/2000 y se convirtió en un habitual bajo la dirección de Lippi, con un total de 27 partidos de liga. Después del 21 de noviembre no se perdió ningún partido, y terminó con dos cifras en la campaña de liga. El Inter quedó cuarto en la Serie A, por lo que se clasificó para las rondas preliminares de la Liga de Campeones, y llegó a la final de la Coppa Italia.

El equipo cayó en la fase de clasificación de la Liga de Campeones 2000/01 a manos del Helsingborg, lo que privó a Recoba, que entonces tenía 24 años, de la oportunidad de cenar en la máxima competición europea. Además, Recoba tuvo que lidiar con un nuevo entrenador, ya que Lippi pagó el precio de la derrota en Helsingborg con su puesto, y Marco Tardelli fue el siguiente en pasar por la puerta giratoria de Moratti. Tras la debacle de Helsingborg, el Inter cayó en la Copa de la UEFA, llegando a los octavos de final, con Recoba marcando unos respetables tres goles en ocho partidos de la competición.

En el ámbito nacional, participó activamente en la campaña de la Serie A, disputando los 16 primeros partidos. La segunda mitad de la temporada no fue tan fructífera, aunque consiguió cinco goles más para terminar con ocho en la temporada, ya que el Inter terminó quinto en la liga. Terminar a 24 puntos del campeón, la Roma, no fue suficiente para el ambicioso Moratti, que prescindió de Tardelli y lo sustituyó por el argentino Héctor Cúper. Recoba ya había cumplido cuatro temporadas en el Inter, y aunque todavía no convencía, Moratti le recompensó con un contrato de larga duración que supuestamente le convertía en el jugador mejor pagado del fútbol mundial. El nuevo contrato resultó ser otro falso amanecer en el ascenso de Recoba, y la polémica no estaba demasiado lejos.

En junio de 2001, el uruguayo fue sancionado por la Federación Italiana de Fútbol en lo que se conoció como el «Escándalo de los Pasaportes», en el que Recoba y varios otros sudamericanos fueron sancionados por utilizar pasaportes falsos para eludir los límites a los jugadores extranjeros. Afortunadamente, para Recoba, la sanción original de una temporada se redujo a cuatro meses en la apelación, lo que le permitió volver a los terrenos de juego en diciembre de 2001.

Participó en cinco de los diez partidos siguientes, marcando un gol, y a partir de febrero se consolidó en el equipo, participando en todos los partidos hasta el final de la temporada, añadiendo cinco goles a su cuenta. El Inter terminó tercero, a solamente dos puntos del campeón, el Juventus. Después de cinco temporadas, y una vez superado el escándalo del pasaporte, ¿había llegado el momento de que Recoba brillara?

En la temporada 2002/03, tras cuatro años de ausencia, el Inter volvió a la Liga de Campeones, aunque tuvo que hacerlo sin Ronaldo, que se marchó a LaLiga y al Real Madrid en verano por una cifra récord. Recoba participó en tres cuartas partes de los partidos de la liguilla en las dos primeras fases, marcando dos goles, y el Inter pasó a cuartos de final. A continuación, el Valencia fue eliminado y Recoba participó en los dos partidos de las semifinales contra el rival local, el Milán, que venció a los nerazzurri por la regla de los goles fuera de casa y que acabaría derrotando a su rival local, el Juventus, en la final.

En el ámbito nacional, el Inter volvió a ser un segundón frente a la Vieja Señora de Turín, ya que el Juventus terminó con siete puntos de ventaja en el liderato de la Serie A. Recoba consiguió nueve goles en 27 partidos de liga, una proporción respetable de uno de cada tres.

Si la carrera de Recoba ha estado marcada por picos y caídas, la temporada 2003/04 puede considerarse la segunda. En una campaña plagada de lesiones, «El Chino» solamente disputó 18 partidos de liga, aunque marcó ocho goles, lo que le valió para terminar segundo en la tabla de goleadores del Inter, por detrás de Christian Vieri.

 El Inter terminó en cuarta posición y, una vez más, no inquietó el liderato de la liga, a pesar de haber empezado bien, con dos victorias y dos empates a cero en las dos primeras jornadas. Sin embargo, los cinco partidos siguientes no produjeron ninguna victoria, y Cúper perdió su puesto en el banquillo en favor de Alberto Zaccheroni debido a la mala racha que incluía una derrota en el derbi. La situación en la Liga de Campeones no fue mucho mejor, ya que el Inter quedó eliminado en la fase de grupos tras una humillante paliza por 5-1 ante el Arsenal en Milán.

La temporada 2004/05 se caracterizó de nuevo por los altibajos tanto para el Inter como para Recoba. Bajo la dirección de otro nuevo entrenador, Roberto Mancini, el club terminó tercero en la liga y ganó la Copa Italia, el primer trofeo desde la Copa de la UEFA nueve años antes. Sin embargo, una vergonzosa derrota global por 5-0 ante su rival, el Milán, en los cuartos de final de la Liga de Campeones, echó un jarro de agua fría sobre la victoria en la copa nacional.

Recoba solo consiguió tres goles en 13 partidos de liga, pero también produjo un momento de magia, etiquetando el gol como el favorito de su carrera. En enero de 2005, el Sampdoria visitó el Giuseppe Meazza y se puso con dos goles de ventaja. Una vez más, Recoba salió del banquillo, evocando el recuerdo de su debut siete años antes, para liderar la remontada. Recoba asistió a Obafembi Martins en el primer gol, antes de que Vieri lograra el empate.

Con el 2-2 en el marcador, el balón le llegó al uruguayo a 20 metros de la portería y lo golpeó de media vuelta con su zurda. El balón se estrelló en la esquina inferior derecha del portero, el efecto lo alejó de sus brazos extendidos, y la cara de Recoba explotó de alegría y alivio. La temporada, y el partido de la Sampdoria, eran su carrera en microcosmos: frustración, lesiones y momentos de victoria de clase mundial capaces de poner en pie a todo un estadio.

Si Recoba estuvo una vez en el lado equivocado de un escándalo cuando fue sancionado por poseer un pasaporte falso, él y su equipo fueron los beneficiarios de otro al final de la temporada 2005/06. El Inter terminó tercero en la liga, a 15 puntos de la Juventus y a 12 del Milan. Sin embargo, los dos primeros se vieron implicados en lo que se conoció como Calciopoli, en el que varios equipos y árbitros fueron acusados de participar en un escándalo de amaño de partidos.

 El Juventus descendió a posteriori, al Milán se le restaron 30 puntos y el Inter fue declarado campeón por defecto. Después de nueve años en Italia, Recoba consiguió por fin el Scudetto. Sin embargo, el éxito debió de ser agridulce para el Chino, ya que el título se ganó fuera del campo y no dentro de él. Tenía 30 años y su influencia en el equipo estaba disminuyendo.

En la temporada 2006/07, Recoba ya no tenía nada que hacer. Tras la desaparición de su más acérrimo rival, el Inter dominó la liga, acumulando la increíble cifra de 97 puntos, perdiendo sólo un partido en toda la temporada y terminando con 22 puntos de ventaja sobre su inmediato perseguidor, el Roma. Sin embargo, «El Chino» solamente disputó 15 partidos de liga y de la Liga de Campeones, y marcó un único gol. En la temporada siguiente, la última en Italia, Recoba fue cedido al Torino, donde disputó 22 partidos y marcó un gol.

Tras su salida de Italia, Recoba permaneció en Europa y se incorporó al Panionios griego durante 18 meses, antes de que las nuevas lesiones, unidas a su elevado salario, hicieran que el club rescindiera su contrato. A sus 33 años, el uruguayo tuvo que regresar a su país, siguiendo la tradición de muchos futbolistas sudamericanos.

 En enero de 2010 volvió a fichar por Danubio, donde pasó 18 meses en el club de su infancia, antes de regresar a otro de sus antiguos equipos, Nacional, en el verano de 2011. Recoba pasaría cinco años en el club, y aunque la edad y las lesiones limitaron sus apariciones, su influencia seguía estando a la vista. Ayudó a Nacional a ganar dos títulos de la liga uruguaya, con un golazo de falta en un Clásico decisivo contra Peñarol.

A sus 40 años, Recoba puso fin a su larga e ilustre carrera en abril de 2016 con un partido benéfico en el que participaron algunos de los mejores talentos sudamericanos de su generación, como Carlos Valderrama, Juan Román Riquelme y sus excompañeros Javier Zanetti e Iván Zamorano. Además, el partido fue presenciado por el presidente uruguayo Tabaré Vázquez, lo que demuestra el cariño que se le tiene a «El Chino» en su país, al que representó 68 veces.

¿Cómo se puede resumir el paso de Recoba por Italia, y su carrera en general? Llegó a la península italiana como un joven prometedor, anunciándose con un debut de sueño. Se podría argumentar que esos 18 minutos contra el Brescia marcaron un punto álgido en su carrera, ya que el resto de sus días futbolísticos estuvieron marcados por las lesiones, las decepciones, los escándalos y el potencial no alcanzado, salpicado por momentos fugaces de pura brillantez. El Inter se convirtió en la fuerza italiana dominante durante su etapa, ganando seis grandes trofeos, aunque la influencia de Recoba en cualquiera de esos triunfos es limitada. Se le recordará con cariño, pero las discusiones siempre irán acompañadas de la advertencia de «qué hubiera pasado si».

Sin embargo, Recoba no lo ve así. Al hablar tras su partido de despedida, comentó: «Tuve la suerte de jugar con tantos campeones, y estaré siempre agradecido. Siempre fui feliz durante mi carrera, porque hacía de mi hobby mi trabajo, y siempre quise entretener a la gente. No me arrepiento de nada».

Como aficionados al fútbol, a menudo nos lamentamos de la percepción de un potencial no alcanzado, pero si el propio hombre está contento con su carrera, a mí me basta, porque sin duda tiene mucho de lo que estar orgulloso.

sábado, 24 de septiembre de 2022

LEYENDAS DEL VALENCIA FUTBOL CLUB

"EL PIOJO" LOPEZ EN ESPAÑA 

FUENTE: "KODRO MAGAZINE"

Claudio Javier «Piojo» López fue leyenda en el Valencia CF, equipo al que llegó el verano de 1996 desde Racing Club, tras un fichaje que ascendió a los 4 millones de dólares. El delantero se caracterizaba por su velocidad y definición en el disparo con la zurda siendo clave para crear peligro en las jugadas de contraataque. Su pierna izquierda fue una de las más cotizadas de finales de los 90.




En la capital del Turia permaneció durante las siguientes cuatro temporadas haciendo historia y ganándose a la afición, siendo aún hoy un ídolo indiscutible de la hinchada blanquinegre. Recuerdo esos tiempos con mucha alegría, mucha emoción y un orgullo inmenso. Vivimos cosas fantásticas. Con el tiempo, he ido dimensionando un poco más todo lo que significó esa época. Pero uno siempre se lleva el cariño. El recuerdo de la gente siempre está presente cada vez que tengo la oportunidad de ver un partido del Valencia. El cariño de la gente es gigantesco y enorme», recordó el jugador en una entrevista reciente.

El «Piojo» debió despedirse de Racing en la fecha 16 del Torneo Clausura en un tibio 0-1 ante Newell’s Old Boys, en Rosario, que dejó a los aficionados con sabor a poco. Tras ello se fue a los Juegos Olímpicos, donde formó parte del seleccionado argentino. A la vuelta, con una medalla plateada en su poder, sin obligaciones contractuales con Racing (ya era jugador de Valencia CF), incluso arriesgándose a una posible lesión, el «Piojo» insistió en jugar y se despidió de Racing de la mejor manera: con un zurdazo tan suyo, alto, al ángulo, a nueve minutos del final, le dio a La Academia un 1-0 festejadísimo ante el Boca Juniors de Verón, Maradona y Caniggia, quitándole las opciones de campeonar al conjunto de la Ribera. Terminó sentado en el travesaño, saludado, vitoreado y aplaudido por un estadio colmado. Esa misma noche se subía al avión que lo llevaría a España.

Cuando llegó a España el camino no fue fácil, ya que llegó como un completo desconocido a un equipo que terminaba de ser el inesperado subcampeón de la Liga en 1995/96 con el técnico Luis Aragonés al frente. Aquella plantilla se encontraba en plena revolución por la pérdida de su estrella Mijatović (fichado por el Real Madrid de Fabio Capello), del brasileño Viola muy querido por la afición y del centrocampista Mazinho. Las nuevas incorporaciones presentaban muchas dudas, como la del mismo Claudio López, el croata Vlaović, el ruso Karpin o incluso la del histórico delantero brasileño Romário en su última etapa en Europa.

Del 1996 al año 2000, Claudio López marcó 74 goles en el Valencia. Pero si hubo un equipo al que le tenía tomada la medida era el FC Barcelona. Al conjunto blaugrana le endosó doce goles en quince partidos. Una pesadilla para los culés, que fue acumulando portadas cada vez que se enfrentaba a ellos. «El Barça se me daba muy bien, sobre todo, por el sistema que empleábamos, rápido, vertical y directo. Su estilo de juego abierto, con espacios, nos beneficiaba y yo me aproveché al máximo».

En su etapa en el Valencia, el futbolista de Córdoba consiguió 3 títulos, y además disputó una final de Champions League. Hay que destacar también su elección como capitán en sus últimas temporadas, junto a Mendieta y Camarasa.

Una Copa del Rey en 1999, una Copa Intertoto en la 1998/1999 y una Supercopa de España en la 1999/2000 acabaron en su palmarés, todo ello a las órdenes de Héctor Cúper. En esa temporada 1998/1999 se quedó a tan solo cuatro tantos del Pichichi, que acabó llevándose el madridista Raúl. En el 2000, disputó la final de la Champions League contra el Real Madrid, duelo en el que acabaron cayendo por 3-0.

El 19 de mayo de 2000 vistió por última vez la indumentaria blanquinegra, en el último partido de Liga contra el Real Zaragoza, el cual culminó con victoria valencianista por 2 a 1 y fue él quien anotó el gol del triunfo. Fue despedido por la afición mientras daba una vuelta al césped entre lágrimas, con una bandera valenciana. Una imagen que quedará por siempre en las memorias de todos los valencianistas. El siguiente club de Claudio López tras dejar Mestalla fue la SS Lazio. El delantero siempre tuvo como objetivo jugar en el fútbol italiano y así vio cumplido su sueño.


viernes, 23 de septiembre de 2022

EL DIA QUE COMPARTIERON PLANILLA

ADRIANO Y RONALDO EN EL  FC INTERNAZIONALE  MILANO

FUENTE: "KODROMAGAZINE"

Ronaldo y Adriano sí coincidieron en la plantilla del FC Internacionale Milano, ¿pero llegaron a jugar juntos en su etapa «nerazurri» con Héctor Cuper como entrenador?




Adriano fichó por el conjunto italiano el agosto de 2001 cuando Moratti pagó por él 8,4 millones de dólares para traspasarlo desde el Flamengo. Aquella pretemporada cuando llegó a Italia, Ronaldo ya empezaba a jugar tras su grave lesión sufrida el 12 de abril de 2000, y de la que había conseguido salir un 8 de marzo de 2001 cuando recibió el alta médica.

«O fenômeno» incluso participó en varios amistosos, el primero el 19 de agosto cuando marcó un gol al Enymba nigeriano, en el que Adriano también participó aunque no coincidieron sobre el terreno de juego. El segundo fue contra el Bastia en el que Adriano lo sustituyó por primera vez en el minuto 68.

Ronaldo no reaparecería en partido de la Serie A hasta el 4 de noviembre contra el Lecce, por el contrario sí que lo haría en la Copa de la UEFA.

Hay que destacar que aquella pretemporada nos ofreció el debut de Adriano en el estadio Santiago Bernabéu sustituyendo a Vieri en el minuto 82, y marcando un golazo de falta con un chut que llegó a los 60 kilómetros por hora que conquistó a los aficionados del Inter de Milán. Por aquel entonces Ronaldo aún se estaba recuperando de su lesión.

Primera parte de la temporada 2001-2002, segunda oportunidad

Adriano disputó muy pocos partidos oficiales durante su primera etapa en el Inter, y todos saliendo desde el banquillo.

El 20 de septiembre Adriano cedió su sitio a Ronaldo en el minuto 62 ante el FC Brasov en la Europa League, y la misma situación se dio en el partido de vuelta en el minuto 51.

Y cuando Ronaldo volvió a disputar un partido de Serie A el 4 de noviembre de 2001, Adriano fue su sustituto en el minuto 17 cuando «O fenômeno» se resintió de la lesión. Ronaldo volvió un 25 de noviembre a los terrenos de juego, pero por aquel entonces Adriano se había caído definitivamente de las convocatorias para la Serie A, para salir cedido el 1 de enero rumbo a Florencia con tan solo un gol en el casillero.

Héctor Cúper nunca confió en alinear a los dos brasileños en el mismo once inicial, prueba de ello es que en los pocos partidos que jugó Ronaldo al inicio de temporada, siempre fueron recambios el uno del otro.

El verano de 2002 Ronaldo fichó por el Real Madrid, mientras que Adriano tras disputar 23 partidos y 7 goles entre Inter y Fiore en su primer año en la Serie A, fue cedido dos años más en un nuevo equipo, donde explotaría como estrella, el Parma. Y los aficionados al buen fútbol se tuvieron que conformar en verlos compartir delantera en la selección de Brasil.


jueves, 22 de septiembre de 2022

EQUIPOS QUE NO SE DEBEN OLVIDAR

EL ATLETICO DE MADRID Y LA COPA DE EUROPA  DEL 74

FUENTE: "KODRO MAGZINE"

Dos finales de Copa de Europa en las que el Atlético de Madrid del Cholo Simeone perdía frente a su vecino de la capital. Dos finales dolorosas que transcurrieron en un periodo de tres años. Pero algunos atléticos, los que han estado alentando al equipo toda la vida, recuerdan, quizá con más dolor incluso, la primera final europea que perdieron. Esta final para la mayoría de gente a la que le gusta el fútbol permanece en el olvido, pero resultó el inicio de una maldición que continúa en nuestros días.




Hablamos de la final de la Copa de Europa, de 1974. El equipo rojiblanco llegaba tras haber ganado a equipos como el Galatasaray, el Dinamo de Bucarest, el Estrella Roja y una semifinal de lo más violenta contra el Celtic de Glasgow, en este orden. Esta última también quedaría en la retina de los atléticos más mayores, e incluso en la historia del futbol.

La final se produjo en Bruselas frente al Bayern de Múnich a partido único, en el estadio Heysel el 15 de mayo. La fiesta de San Isidro se celebraba en la capital española. Esto hizo que 25.000 colchoneros se trasladaran a la ciudad belga para animar al club de sus amores. Era la primera vez que ambos equipos llegaban a una final europea.

El Bayern de aquel entonces, como hoy en día, era la base de la selección alemana. Un equipo característico por su gran superioridad física. Entre sus filas encontrados a jugadores de gran calidad como Sepp Maier, el mejor portero de entonces, el mítico F. Beckenbauer (el «Kaiser»), Uli Hoeneß y «Torpedo» Müller. Todos ellos campeones de Europa con su selección. De ahí que fuera el máximo aspirante al Mundial que se celebraba ese verano de 1974.

La retransmisión del partido comenzó dando un paseo por las gradas, mientras los equipos saltaban al campo. El colegiado encargado de dirigir el encuentro era el belga Vital Loraux. Con el pitido inicial dio comienzo el partido. Se inició con un ritmo acompasado, que no lento. Esto, sin embargo, fue algo que los hinchas del «Atleti» que se quedaron en España no pudieron ver. Un fallo técnico hizo que los primeros 15 minutos no se retransmitieran por los televisores españoles.

El equipo alemán salió con su esquema característico. El «Kaiser», desde su posición de líbero, iniciaba el juego del Bayern. El «Atleti» en cambio, en los primeros minutos se mantuvo expectante. Con el paso de los minutos, se fue haciendo dueño del balón y comenzó a acercarse al arquero alemán. El Bayern respondía contraatacando. La vida al revés.

El «Atleti» dominó la mayor parte de los 90 minutos. Luis Aragonés llevaba la batuta del equipo. Cabe destacar las actuaciones de Gárate, Ufarte y el capitán Adelardo. Aun así, concluyeron los noventa minutos sin goles por lo que se pasó a la prórroga. Hay que decir, que entonces si también la prorroga finalizaba sin goles o con empate, se celebraría un partido de desempate. Esto quiere decir que no se tirarían las tandas de penaltis.

Comenzó la prórroga y el «Atleti» seguía dominando el balón sobre el césped belga. Sin embargo, con el transcurso del juego se vio cómo las fuerzas del equipo madrileño empezaban a flaquear. Como consecuencia, los contraataques del equipo bávaro eran cada vez más peligrosos. No fue hasta el minuto 114 cuando, desde una falta en el borde del área, Luis Aragonés clavaría el esférico limpiando las telarañas de la esquina derecha de Maier. De ese gol se recuerda más la celebración anticipada del propio Luis, que el lanzamiento magistral en sí. El estadio entero se inundó de banderas y de la alegría «rojiblanca».

Pero esta alegría no duraría mucho. En el minuto 120 de la prórroga, el jugador del Bayern de nombre impronunciable, Schwarzenbeck, empataría el encuentro. Un punterazo a ras de hierba desde fuera del área, entraría pegado al palo derecho de la portería de Miguel Reina. Tras esto finalizaría el partido, llevando a ambos equipos a disputar un encuentro de desempate 48 horas después.

Los ánimos del «Atleti» estaban por los suelos. Los jugadores no durmieron en toda la noche pensando en ese gol en el último minuto. Como contaron años después, el equipo madrileño estaba menos preparado tanto física, como psicológicamente que los alemanes. Corrió la leyenda de que el portero, Miguel Reina – padre del jugador de la selección española Pepe Reina- no llegó al gol del empate porque acababa de llegar a la portería tras haberle regalado los guantes a un fotógrafo de Marca, celebrando el ya presumible triunfo colchonero.

El partido de desempate no pudo ir peor. El «Atleti» cayó 4-0 ante un Bayern muy superior físicamente. El cansancio por el primer partido y el bajo estado anímico de los jugadores «rojiblancos» pasó factura. El Bayern de Múnich ganaría así, su primera Copa de Europa. El «Atleti» perdía su primera final de la máxima competición europea.

En 1974, perdía en el último minuto y contra un equipo de uniforme blanco. En 2014 y 2016, se repetiría la historia. Una maldición que todavía no se ha roto. Sin embargo, el «Atleti» se sitúa hoy en día como uno de los equipos más competitivos de Europa. La «orejona» sigue siendo un sueño para todos esos atléticos que nunca dejan de creer


miércoles, 21 de septiembre de 2022

GARRA Y CORAZON

LA TEMPLANZA DE FABIAN GUSTAVO CARRIZO 

FUENTE: "XENEN.COM.AR"/CARLOS AIRA 




1.- Fabián Gustavo Carrizo en Tigre, provincia de Buenos Aires, el 27 de julio de 1966.

2.- Luego de un breve paso por las divisiones inferiores del Club Atlético Tigre recaló en Boca Juniors. Allí se destacó como un mediocampista técnico y muy tenaz a pesar de su juventud.

3.- Debutó en la primera xeneize con sólo 17 años. Fue el 22 de diciembre de 1983. Última fecha del Metropolitano. Boca alineó un equipo de juveniles por haber licenciado a los profesionales. Aquel miércoles, Boca fue goleado 5 a 1 por Instituto de Córdoba en Alta Córdoba. Dirigido por el Zurdo Miguel Ángel López, Boca alineó a Walter Medina; César Lahorca (Barragán), Miguel Iturrieta, Rubén Manfredi y Alberto Benitez; Luis Fernández, Fabián Carrizo y Oscar Galarza; Javier Prado, Roberto Franco y Daniel Pannatieri (Ramírez).

4.- Diferentes entrenadores no lo tuvieron en cuenta (Dino Sani, Alfredo Di Stéfano, Mario Zanabria) hasta que en enero de 1987 llegó César Luis Menotti. Sorprendió al alinearlo como titular del equipo. Un mediocampo muy recordado: Milton Melgar, Fabián Carrizo y Carlos Tapia. Con la llegada de Claudio Marangoni (1988) y Blas Giunta (1989) debió moverse hacia la derecha. En su primera etapa en Boca Juniors obtuvo la Supercopa 1989, jugando cuatro partidos.

5.- En búsqueda de oportunidades, en enero de 1991 pasó a San Lorenzo de Almagro. Allí fue figura en otro mediocampo muy recordado: Gustavo Matosas, Fabián Carrizo y Leo Rodríguez. Su paso por Boedo fue largo, y si bien no estuvo coronado con títulos, dejó un excelente recuerdo. Con la camiseta azulgrana disputó 129 partidos, señalando 2 goles. Por la Copa Libertadores de 1992, jugó 12 partidos.

6.- A comienzos de 1995 pasó a Independiente. Su primer paso por la Avellaneda roja fue efímero, ya que a mediados de aquel año regresó a Boca Juniors. Dirigido por Silvio Marzolini, la vuelta de Diego Armando Maradona junto a la presencia de cracks como Claudio Cannigia, Cristian González - entre otros - presagiaban una vuelta olímpica que finalmente no se concretó. Carrizo jugó una temporada en su regreso a Brandsen 805 ya que no era del gusto de Carlos Bilardo. Contando sus dos pasos por Boca Juniors, Carrizo disputó 161 partidos con la azul y oro, conquistando 5 goles.

7.- En septiembre de 1996 regresó a Independiente. Las lesiones mellaron su rendimiento físico. Estuvo tres temporadas en la Avellaneda roja con pocas posibilidades de ser titular. Jugó 29 partidos oficiales - tres por la Copa Mercosur - sin convertir goles.

8.- Su último paso por el fútbol profesional fue vistiendo la camiseta del Club Atlético Huracán. A mediados de 1999 el Globo había descendido a la B Nacional. Carrizo fue un estandarte del equipo, dirigido por Carlos Babington, que logró título 1999/00 y regresó a la máxima divisional. Luego jugó una temporada en primera división en gran forma, siendo querido y respetado por la hinchada quemera. En Parque de los Patricios jugó 62 partidos marcando un gol.

9.- Alto, rubio, con gran técnica sin tenerle asco a la pierna fuerte. La carrera profesional de Fabián Carrizo se realizó entre 1983 y 2001. En la misma vistió camisetas pesadas: Boca Juniors, San Lorenzo, Independiente y Huracán. Fueron 397 partidos, marcando 8 goles. Obtuvo la Supercopa 1989 y el Nacional B 1999/00.

10.- A su profesión de futbolista profesional se sumó la de Radiólogo, que ejerció en sus primeros años de profesión.

 

martes, 20 de septiembre de 2022

EL NACIMIENTO DE UNA LEYENDA

 O´RE Y PELE "EL NACIMIENTO DE UNA LEYENDA"

FUENTE: "KODRO MAGAZINE"

«Pelé, el nacimiento de una leyenda», es una película biográfica estadounidense sobre los inicios de la vida del futbolista brasileño Pelé. La película está dirigida y escrita por el dúo Jeff y Michael Zimbalist, y narra la juventud del futbolista brasileño y su ascensión a la fama, así como su liderazgo en la selección que conquistó el Mundial de Suecia de 1958.




La película fue rodada en Brasil, con los jóvenes actores Leonardo Carvalho y Kevin de Paula encarnando el joven Pelé durante las etapas que van de los 9 a los 17 años, respectivamente. Zimbalist afirmó que se concentraron en los primeros años de Pelé por razones dramáticas. «Fue el nacimiento de la leyenda que va asociada al nacimiento la identidad nacional brasileña, viniendo de la derrota en 1950 ante Uruguay en Maracaná». La película también está muy centrada en la relación entre Pelé y su padre, que le ayudó en todo momento a ser la persona y el jugador que llegó a ser.


lunes, 19 de septiembre de 2022

FUTBOL FEMENINO

EL PRIMER PARTIDO JUGADO EN LONDRES 

FUENTE: "KODRO MAGAZINE"

Sufragistas y futbolistas, auténticas pioneras del fútbol femenino en Gran Bretaña. El primer partido oficial, reconocido por la FIFA, jugado por mujeres tuvo lugar en Crouch End Athletic Ground de Londres el 23 de marzo de 1895, y lo disputaron dos equipos que representaban el norte y el sur de la ciudad.



Estas valientes desafiaron las prohibiciones y las opiniones intolerantes de la época y disputaron un duelo que estuvo protagonizado por equipos del norte y del sur de la capital inglesa y fue así como el norte doblegó por siete goles a su contrincante.


sábado, 17 de septiembre de 2022

CON LA ARTILLERIA PESADA

MARCELO MARTINS EN BOLIVIA

FUENTE: "KODRO MAGAZINE"

Marcelo Martins es la viva recreación de la figura del clásico delantero centro goleador, un auténtico artillero de la vieja escuela que lidera la actual selección de Bolivia, situándose como el tercer máximo goleador en activo de las eliminatorias de Conmebol, solamente por detrás de Messi y Luis Suárez. A menudo es confundido por su apellido: en Bolivia es conocido como Marcelo Martins (siendo Martins su apellido paterno). Mientras que en Brasil y en otras partes del mundo es conocido como Marcelo Moreno por su apellido materno.




De padre brasileño y madre boliviana, y nacido en la ciudad boliviana de Santa Cruz de la Sierra, Martins jugó en las categorías inferiores de la selección brasileña sub-18 y sub-20, convirtiéndose en el primer jugador extranjero en formar parte de la cantera brasileña y en el quinto jugador extranjero en vestir la camiseta de la selección brasileña en un partido oficial, pero optó por representar a la selección absoluta de Bolivia como profesional.


 La situación más curiosa que generó esta condición de doble nacionalidad tuvo lugar en la previa del partido entre Bolivia y Brasil por las Eliminatorias Sudamericanas al Mundial 2018, cuando el delantero participó de la foto que se tomó la selección brasileña antes de comenzar el encuentro. Marcelo Martins, con camiseta verde, se colocó entre los integrantes del conjunto dirigido por Tite, que vestían de amarillo con un motivo especial, homenajear a su padre Mauro Martins, oriundo de Brasil.


A pesar de haber nacido en Bolivia, Marcelo empezó su carrera en el fútbol brasileño, concretamente en el Vitória, convirtiéndose en titular en 2006, en el Campeonato Brasileiro de la Série C. Marcó 12 goles, cuatro menos que el máximo goleador. A mediados de 2007, se trasladó al Cruzeiro, convirtiéndose en titular al año siguiente, cuando marcó 8 goles en la Copa Libertadores 2008, siendo el máximo goleador, junto a Salvador Cabañas.

El 27 de mayo de 2008 firmó un contrato de cinco años con el Shakhtar Donetsk. El club ucraniano acordó pagar 9 millones de euros por el jugador. El 1 de noviembre, marcó un doblete en la victoria por 3-1 en el partido de liga contra el Zorya Luhansk. A pesar de haber ganado la Copa de la UEFA 2008-09, el 29 de mayo de 2009, incapaz de consolidarse en Donetsk, Moreno se incorporó al Werder Bremen alemán en calidad de cedido. El Bremen había intentado inicialmente fichar a Moreno el verano anterior, pero el jugador se decantó por el Shakhtar. El 2 de agosto de 2009, marcó un doblete en un partido de la DFB-Pokal 2009-10 que se saldó con una victoria por 5-0 contra el Union Berlin. El 29 de enero de 2010, el Bremen rescindió su contrato y el jugador regresó al Shakhtar Donetsk.

El día de la fecha límite de traspaso se acordó una cesión de seis meses entre el Shakhtar y el Wigan Athletic para llevar al jugador a la Premier League. El 1 de febrero fichó por el Wigan en calidad de cedido. Tras su regreso al Shakhtar, causó una buena impresión al marcar 7 goles en 23 partidos. Sin embargo, tras figurar como reserva la temporada siguiente, Moreno se incorporó al Grêmio a finales de diciembre de 2011 y firmó un contrato de cinco años con el equipo brasileño a partir de 2012. Luego fue cedido al Flamengo en la temporada 2013[8] y al Cruzeiro en 2014.

En febrero de 2015, Moreno fue transferido al Changchun Yatai de la Superliga china. Su primera temporada en China fue exitosa, marcando más de 20 goles en 53 partidos. En 2017 fichó por el Wuhan Zall de la Liga China, siendo el máximo goleador conjunto en su primera temporada con 23 goles en liga, junto con el colombiano Harold Preciado. En 2019 Moreno fichó por el Shijiazhuang Ever Bright. Aunque solo jugó 12 partidos con ellos, marcó 7 goles.

El 19 de febrero de 2020, Moreno regresó a su antiguo club, el Cruzeiro, con el que jugó hasta ser traspasado al Cerro Porteño en 2022.

 Debido a su éxito jugando para el Cruzeiro, Moreno recibió su primera convocatoria para un partido amistoso contra Perú el 12 de septiembre de 2007. El 20 de noviembre de 2007, durante un partido de clasificación para el Mundial de 2010 contra Venezuela, marcó sus dos primeros goles como internacional. El 14 de octubre de 2008, marcó los dos goles de Bolivia contra Uruguay en el empate 2-2. También abrió el marcador en la histórica victoria por 6-1 de Bolivia sobre la Argentina de Diego Maradona el 1 de abril de 2009. Unos meses después, en octubre, marcó el gol de la victoria por 2-1 ante la poderosa Brasil en el estadio Hernando Siles.

Moreno fue incluido en la selección de Bolivia para la Copa América de Chile 2015. El 15 de junio, marcó el gol decisivo en el segundo partido de la fase de grupos del equipo, que derrotó a Ecuador por 3-2, y dio a la Verde su primera victoria en la Copa América desde el torneo de 1997. Fue el máximo goleador de Bolivia en el torneo, con dos goles, y también fue el único jugador boliviano que marcó en la fase eliminatoria, ya que el equipo perdió por 1-3 ante Perú en los cuartos de final. Marcelo Martins anunció su retirada de la selección el 15 de septiembre de 2015 junto con el entonces capitán Ronald Raldes, alegando divergencias con el seleccionador Julio César Baldivieso.

Moreno volvió a la selección en 2016 después de que Guillermo Ángel Hoyos sustituyera a Baldivieso. El 12 de noviembre de 2020, Moreno marcó su vigésimo gol internacional en la derrota por 2-3 ante Ecuador, igualando el récord de goles de todos los tiempos de Joaquín Botero con Bolivia.

Actualmente, es uno de los máximos artilleros en activo de las eliminatorias para el Mundial y un delantero boliviano de leyenda.


viernes, 16 de septiembre de 2022

EL PASE QUE NO SE DIO

GEORG BEST AL REAL MADRID 

FUENTE: "KODRO MAGAZINE"

George Best estuvo muy cerca de convertirse en el fichaje más mediático de la temporada 1972-1973, o al menos eso daba por hecho el Diario As en su edición del 28 de diciembre de 1972. En aquella edición memorable de los Santos Inocentes, se aseguraba que Santiago Bernabéu tenía cerrada la llegada del astro norirlandés a Chamartín, tras llegar a un acuerdo con el Manchester United, incluso se llegó a publicar una foto del presidente con el jugador (tomada en Santa Pola) para dar credibilidad al acuerdo.




La inocentada explicaba que los detalles económicos de la operación rondaban los 10 millones de pesetas para el jugador, más un salario mensual de 50.000 pesetas (300 libras). Asimismo, el club le habilitaría un apartamento de lujo en la capital y Best tendría derecho a 30 días de vacaciones anuales. Además, Bernabéu había insistido en que diese una imagen acorde al club y le pidió que se cortase el pelo y se afeitase la barba, a lo que el norilandés accedió sin problema para hacer realidad su sueño de recalar en el Real Madrid.

Miles de madridistas se hicieron a la idea de ver a George Best en Chamartín. Muchos aún recuerdan aquello, y aún hoy en día algunos medios de comunicación usan aquella anécdota para el clickbait. El día que George Best fichó por el Real Madrid


"HISTORIAS QUE VALEN LA PENA CONOCER"

LA HISTORIA DE LOS HERMANOS BONETI FUENTE: "KODRO MAGAZINE" Ivano y Dario Bonetti fueron los únicos hermanos de la mítica plantill...